Vistas de página en total

sábado, 6 de abril de 2013

Parque Nacional Monte León. La Lobería, Santa Cruz, Argentina

Si llegar hasta la pasarela fue todo un tema, surcar los cuatrocientos metros de ella fue una odisea, las ráfagas eran por momentos constantes y me inmovilizaban por completo, o me desplazaban fuera de ella, o si no eran cortas e imprevistas, las tomas fotográficas las tenía que realizar cuando estaba paralizado por una de ellas, porque cuando amainaban, bruscamente me cambiaban de dirección, moviendo cuerpo, brazos y cámara para cualquier lado. Al final del recorrido cuando les deje la página oficial del PN, verán que este sector está especialmente desaconsejado en momentos de viento, ya que podes caer del camino y el golpe puede provocarte cualquier tipo de lesión, se entiende el tema que menospreciar las indicaciones preexistentes y desafiar tontamente a la naturaleza puede ocasionar cualquier trastorno desagradable, en mi caso se trataba del enceguecido afán por llegar, no midiendo para nada las negativas consecuencias posibles.
Consumada la irresponsabilidad, las visiones resultantes son de una magnificencia que sobrepasan lo imaginado, uno transita por sobre la cabeza del león para llegar a los dos miradores que allá a lo lejos te permiten ver una lobería de ejemplares de un pelo y un apostadero de aves, sobre una saliente terrosa con túneles en su base. La furia del viento no me dejaba ver lo suficiente, tenía que cerrar los ojos por la cantidad de arenisca que se te incrustaba en ellos, los abría entre ráfaga y ráfaga por cuestión de unos pocos segundos y calculo haber estado mas de dos minutos zarandeándome para todos los costados con la cámara en mano esperando la fracción de tiempo adecuada para poder realizar una toma con la máquina a rollo y que no resultara movida.
La vuelta empeoró un poco más, calculo embestidas que superaban los 80/100 kilómetros, embestidas que me empujaban fuera de la pasarela, o me golpeaban contra las barandas en la parte inicial de la misma, que circula a una considerable altura del piso.
Ya sobre el camino principal el próximo punto de interés es el mirador de la Isla Monte León, a una corta distancia de donde me encontraba, allí el viento me iba a deparar otro desafío digno de Míster Bean.

1 comentario:

  1. Diríamos por aquí..."pero quién te quita lo bailado!" Je! Unas fotos maravillosas las que compartís! Gracias, entonces, por jugarte" en esta aventura. Abrazooo, Rodo.

    ResponderEliminar